Estos días he estado dedicada a escribir las 3 publicaciones de un viaje de 5 semanas a Oaxaca, principalmente a la capital, Oaxaca de Juárez y si están buscando información de la ciudad pueden visitar la primera entrada de cosas para hacer y la segunda de lugares para comer. Pero si les interesa conocer otros planes para hacer en los alrededores, sigan leyendo esta publicación que viene cargada de cerámicas, tejidos artesanales, tinturas naturales, mercados tradicionales, mezcal sostenible y artesanal, sitios arqueológicos, y maravillas naturales como un árbol enorme de más de 2000 años y cascadas petrificadas.
El Valle Central, o los Valles Centrales de Oaxaca porque son 3, fue territorio Zapoteco, después tuvo influencia Mixteca y finalmente fue colonizado y habitado por los Mexicas hasta la llegada de los españoles en la época de la conquista.
Así que con semejante mezcla de tradiciones prehispánicas no es sorprendente que esta zona sea un hervidero de técnicas ancestrales de alfarería, cestería, tejido, bordado y destilación de licores de agave.Técnicas que afortunadamente no pudieron ser destruidas por los colonizadores y por la modernidad y que siguen muy vivas y son el principal atractivo turístico de la zona.
Para escribir esta entrada hice varias salidas diferentes, 5 en total, porque hacer todo en un mismo día es imposible, y como siempre, me quedaron cosas, muchas por conocer, así que aquí les comparto los lugares que logré conocer, todos quedan a una distancia de entre media hora y unan hora y media del centro de la ciudad y recomiendo a ojos cerrados contratar a Mauricio, nuestro conductor de confianza que es muy amable, patológicamente cumplido (como yo) y además es guía también entonces si uno le pregunta tiene muchas cosas para contar. Su teléfono para que lo contacten es +52(951)2228007.
Si la opción de taxi no se acomoda a su presupuesto o a su gusto y prefieren tener la independencia de un carro es barato y fácil alquilar y hay varias agencias, nosotros lo hicimos para el día que más nos movimos porque nos daba independencia y como éramos 5 personas nos salía muy barato, pero de resto todos los otros días nos movimos felices con Mauricio.
También está la opción de moverse en bus pero la verdad yo nunca logré entender cómo funcionaban porque había que hacer varios cambios y es muy confuso y sin paradas establecidas (como en Colombia) y los horarios son muy irregulares, así que si están cortos de tiempo recomiendo pensar mejor en la opción del taxi.
Lo voy a organizar por zonas, la primera zona sería: Hierve el agua, Mitla, Teotitlán, Tlacolula y el Tule:
TEOTITLÁN DEL VALLE
Empiezo por uno de mis favoritos, este pueblo queda más o menos a 50 minutos del centro de Oaxaca de Juárez, es pequeño y muy tranquilo, en las calles no se ve mucha gente pero detrás de sus fachadas tranquilas se esconde una maestría en el arte de tejer con lana y teñir con tinturas naturales comparable con la de países como Marruecos o Turquía.
Es un pueblo principalmente, sino es totalmente, Zapoteco, y nos contaron que prácticamente el 90% de sus habitantes viven del tejido, ya sea haciendo sus propias creaciones para vender a los visitantes o en los mercados, o, haciendo trabajos por encargo para artistas, hoteles, diseñadores (como rrres que les mencionaba en la primera publicación sobre Oaxaca de Juárez).






Yo fui dos veces y las dos fueron experiencias preciosas. La primera fue a visitar el taller y hogar de la familia de Christian Mendoza Ruiz. Maestro teñidor y tejedor, no se dejen engañar por su edad, Christian es muy joven pero viene de una tradición de varias generaciones por el lado de su papá y de su mamá de tejedores y teñidores de Teotitlán del Valle y oírlo hablar de su arte y oficio es absolutamente fascinante e inspirador.
Para agendar una visita a su taller pueden escribirle por Instagram o Facebook y recomiendo que lo hagan porque conocer su casa y su familia vale mucho la pena, y ni qué decir de los tesoros que se encuentra uno en la tienda.























Otro lugar que visité y que me encantó fue Linda Zapoteca un taller artesanal que me gustó mucho porque sus propuestas son muy diferentes a las de los demás, más contemporáneas y el almacén que tienen es muy bonito la forma de mostrar los productos y la decoración valen la pena, no tengo fotos de las piezas porque no permiten tomar, pero si nos dejaron tomar fotos de la exhibición de lanas y tinturas naturales que también es muy linda.






La segunda vez que fui, con otro grupo de personas, elegimos visitar Bii Daüü, una cooperativa local que reúne el trabajo de muchos artesanos y que además ayuda en la investigación y conservación de las técnicas ancestrales de tejido y teñido.
Su misión es «Trabajar de manera solidaria, con igualdad y equidad, en la producción de los textiles con tintes naturales para alcanzar la mejor calidad; incluyendo el propósito de cuidar nuestra salud y el medio ambiente, y lograr así un desarrollo social, cultural y económico, integral.· y la cumplen a cabalidad porque visitarlos es ¡la experiencia más completa! se puede agendar con anticipación o simplemente llegar y preguntar si están disponibles y con la mayor amabilidad y sin costo, reciben a los visitantes y explican todo el proceso de teñido, los diferentes recursos que se usan y cómo se usan. Aquí es donde uno aprende de dónde sale el índigo, la cantidad de tintes que se pueden extraer de plantas y de la famosísima grana cochinilla, un insecto que parasita las hojas de nopal y que produce un rojo brillante y muy estable al molerse, y que mezcaldo con otros tintes, o con sustancias que cambien su PH como limón puede producir toda una gama que va desde los naranjas hasta los violetas.
La tienda también tiene tesoritos que son totalmente teñidos con tintes naturales.
















HIERVE EL AGUA
Dejando lo artesanal de lado por un momento, seguimos con las maravillas de la naturaleza, otra de mis cosas favoritas. Más o menos a una hora y media del centro de Oaxaca de Juárez está este conjunto de cascadas petrificadas formadas hace miles de años por acumulación lenta de minerales que van corriendo por el agua.
Parte del agua fue desviada para formar un complejo de piscinas en donde las personas se pueden bañar. Los colores son increíbles y el paisaje al frente es una cadena montañosa muy linda.
Uno puede ir independiente y contratar un guía al llegar, siempre están en el parqueadero y lo acompañan a uno durante la caminada y le explican todo y trabajan por aporte voluntario. Para entrar hay que atravesar una carreterea y la comunidad cobra 20 pesos por el paso (más o menos 1 dólar).
La caminada larga dura más o menos una hora y vale la pena porque ofrece la mejor vista de las cascadas porque se baja por escaleras casi hasta la la punta de la cascada más grande que tiene unas texturas increíbles, casi que parecen las alfombras de Teotitlán del valle.










Lo otro que se puede hacer es bajar por una rampa o sendero corto hasta las piscinas que son las aguas que corrían que fueron represadas para formar piscinas en las que uno se puede bañar.
Y aquí quiero hacer un comentario que de pronto no va a ser muy popular pero estando allá sentí que era muy triste que esta maravilla natural fuera intervenida para el disfrute de nosotros los humanos. Estas aguas no estaban represadas, y si, se ve muy lindo, pero ¿por qué no las dejamos correr? y otra cosa es que no se debería poder caminar sobre los depósitos minerales, lo que la naturaleza se tarda décadas en formar lo destruimos con un par de pasos por tomar una foto que pasará a formar parte de las miles que publicamos en las siempre hambrientas redes sociales. No se, me encantaría que liberaran al agua y la dejaran hacer libremente su recorrido, la naturaleza es lo único que tiene un diseño perfecto y es muy insolente de nuestra parte interrumpirlo solo para hacer más dinero. Es mi opinión y bienvenidos todos los comentarios al respecto siempre y cuando sean con respeto.












Si les interesa tomar fotos cuando está vacío recomiendo salir a primera hora de Oaxaca para llegar a Hierve el agua antes de las 10 am que es cuando empieza a llegar la gente, primero ir a las piscinas que es donde más se concentran las personas y después hacer la caminada hasta la parte baja de la cascada petrificada.
MERCADO DE TLACULULA DE MATAMOROS
Relativamente cerca a Teotitlán del Valle queda Tlacolula, un pueblo más grande que es el lugar en el que se hace el mercado principal del Valle de Tlacolula (uno de los 3 Valles centrales) y en este mercado se consigue de todo: chiles, moles, cacao, verduras, frutas, quesillo, panes, todo lo que el paladar quiera y en la parte de afuera: artesanías de todo el valle a muy buenos precios: alfarería verde de Atzompa y negra de San Bartolo Coyotepec, lana de Teotitlán del Valle, bordados de Istmo de Tehuantepec y de San Vicente Coatlán. En fin, es un lugar en el que se vive, se respira y se comercializa la cultura Oaxaqueña.
Recomendado comerse unos taquitos de barbacoa o quesadillas de flor de calabaza con quesillo o empanada de mole amarillo donde la señora Juana que es delicioso todo.
El mercado está todos los días pero es más grande y con más oferta los domingos.












MITLA
Mitla es un pueblo pequeño que queda entre Hierve el agua y Teotitlán del Valle, su atracción principal es la zona arqueológica que no es muy grande pero es muy famosa porque era la capital religiosa de los Zapotecos y por sus mosaicos y construcciones ornamentadas.
El pueblo es famoso por los tejidos en algodón que se encuentran en cojines, manteles, ropa, y todo tipo de trapitos y textiles.
De nada de esto tengo foto porque llegamos a la zona arqueológica a las 2:55 pm y ya estaba cerrada, entonces no pudimos verla sino de afuera. Visitamos el mercado pero sentimos que las cosas podían ser chinas o hechas industrialmente, sería muy bueno poder visitar algún lugar como Bii Daüü en el que uno sepa que está comprando artesanías reales y apoyando a la comunidad.
EL ÁRBOL DEL TULE
El Tule es un pueblo que queda casi volviendo a Oaxaca por este mismo camino, es un pueblo tranquilo y bonito y su principal atractivo es un árbol que tiene más de 2000 años y que para los que amamos los árboles, vale mucho la pena visitar.
Se debe pagar una entrada de 30 pesos mexicanos y esto permite la entrada a un jardín con una iglesita que casi queda escondida por el tamaño del árbol de Ahuhuete, que tiene un tronco con casi 15 metros de diámetro.








Otro grupo de lugares que se pueden visitar en el mismo día son: Atzompa, Monte Albán y el Centro de las Artes San Agustín (CASA) en San Agustín Etla.
SANTA MARÍA ATZOMPA
Este pueblo queda más o menos a 20 minutos de Oaxaca y es muy conocido por su trabajo en cerámica, específicamente la cerámica de esmalte verde que vana ver en todas partes en chocolateras, platos, pocillos y todo tipo de utensilios, también son famosos los pocillos con margaritas pintadas y los pocillos y otros recipientes de barro rojo con caras en la superficie (mis favoritos).

Nosotros estuvimos visitando un taller muy especial que se llama Taller 4 elementos y se especializa en hacer cerámica ahumada, desde ahumadores para el incienso, copitas de mezcal, todo tipo de contenedores y esculturas, Lalo Martínez, alfarero de familia de tradición en el oficio, hace lo que sea con la técnica que el mismo se inventó para diferenciarse de los demás que hacen cerámica esmaltada verde.










En Atzompa también hay un sitio arqueológico que aún no ha sido muy estudiado y que dicen que es impresionante y puede ser una continuación de Monte Albán que está al otro lado de la montaña. No lo visité pero me quedó pendiente para cuando vuelva.
CENTRO DE LAS ARTES DE SAN AGUSTÍN (CASA)
¿Se acuerdan que en la primera publicación les hablé del artista Francisco Toledo y lo importante que fue su labor como gestor cultural para que Oaxaca sea hoy el centro de cultura que es?
Pues el CASA es otra de sus creaciones, una ex fábrica de hilos ENORME que funciona como museo de exposiciones temporales, como centro para talleres de todo tipo de técnicas y artes, lugar de residencias para artistas y un montón de cosas más. Este lugar es precioso y representa un triunfo grande de lo que puede hacer la cultura cuando se lleva, como decía Toledo, a las personas que no tienen los recursos o las oportunidades de acceder a ella.
El CASA queda en un pueblo muy lindo que se llama San Agustín Etla más o menos a 45 minutos del centro de la ciudad de Oaxaca, vale la pena consultar horarios porque son medio erráticos y no se sabe muy bien cuándo abren y cuándo cierran.
En la tienda del CASA se consiguen los famososo papalotes (cometas) de Toledo y otras cosas lindas hechas por él y otros artistas locales.










Hay un taller de papel cerca que dicen que es muy lindo, pero nunca pudimos saber los horarios y las dos veces que fuimos estaba cerrado, si logran visitarlo me cuentan.
Si pudimos visitar otro taller de papel artesanal en San Agustín Etla que se llama El Artesano, que si les interesa todo este cuento vale mucho la pena, es necesario llamar antes y pedir cita para visitarlo.







MONTE ALBÁN
La zona arqueológica más importante del estado de Oaxaca era la capital comercial de los Zapotecos y está muy bien preservada. Queda como a 25 minutos del centro de la ciudad y es muy fácil llegar en taxi. Hay que revisar horarios porque como dije antes, son raros y cierran a las 3 pm y a veces no abren los fines de semana.
Se puede recorrer con un guía o, uno solo, nosotras lo hicimos solas porque el tour guiado duraba demasiado y no queríamos oír toda la historia sino simplemente apreciar las ruinas que son impresionantes.












MEZCAL REAL MINERO
Termino este recorrido por los Valles centrales con un lugar que es muy especial, la visita al vivero y al palenque (como se llama a las plantaciones y plantas de destilación de mezcal) de Mezcal Real Minero en Santa Catarina Minas, a una hora larga del centro de Oaxaca.
El proyecto de Real Minero es diferente a los demás por varias cosas: son una de las familias con tradición mezcalera más antigua de Santa Catarina Minas, su producción busca ser sostenible, sin hacer monocultivo de agave sino mezclando el cultivo con otras especies y polinizadoras nativas de la zona y finalmente su proceso es absolutamente artesanal, con los mismos alambiques de barro que usaba el bisabuelo de la familia conocido como «Papa Chico» que trabajaba en palenques desde finales del siglo XIX cuando destilar mezcal era ilegal y se tenían que adentrar al monte a cultivar los agaves.
Nosotros tuvimos la suerte de hacer una visita guiada por Graciela, bisnieta de «Papa Chico» y gerente del proyecto, una mujer tremenda, inspiradora, elocuente, generosa y que destila su amor por su oficio y el oficio de su familia. Por siempre estaré agradecida de su generosidad con su tiempo y su energía para dedicarnos unas horas y contarnos cómo se hace mezcal artesanal y sostenible.
La visita incluye un paseo por el hermosísimo vivero/jardín en donde uno conoce todos los tipos de agave que cultivan (hay vida más allá del Espadín que es el favorito principalmente porque crece más rápido) y se puede ver el proceso desde planticas bebés hasta agaves de décadas de edad.

















Después nos fuimos para el palenque a ver cómo era la cocción, molienda y destilación del corazón de los agaves para sacar finalmente el tan ansiado mezcal, el proceso es trabajoso, lento y completamente artesanal, pero el resultado es un mezcal absolutamente delicioso y muy especial que vale cada centavo.













Terminamos una tarde perfecta con una cata de mezcales Real Minero (mi favorito fue el Tobalá) y algunos de «La Mezcalillera» que es la otra marca que tiene Graciela de mezcales medicinales, destilados con hierbas aromáticas y que tienen diferentes usos y saben delicioso.
Sobra decir que tuvimos que comprar una maleta adicional para poder llevarnos todo el mezcal que compramos porque en Colombia no se consigue nada remotamente parecido a lo que probamos aquí.






Esta experiencia fue absolutamente fascinante y si van a escoger pocas de esta entrada recomiendo esta y Teotitlán del Valle. Para reservar su visita pueden dar click aquí o escribirle a Joselin la encargada de las visitas al +525588064601 .
Y con esta cata de mezcales deliciosos cierro esta serie de entradas de Oaxaca, hoy leía en Instagram una frase que me gustó mucho y que describe a la perfección lo que sentí estando en este lugar «Donde sientas el éxtasis de la vida, ahí es» y efectivamente, aquí fue, aquí lo sentí.
Como siempre no duden en dejarme sugerencias, correcciones y si creen que le puede servir a alguien, compartan.